Comprar oro como protector bucal
Mike Tyson no es famoso por su elocuencia. Pero, a pesar de no ser un Mohamed Ali, ha estado de gira este año promocionando su autobiografía que verá la luz el próximo mes. Y el mejor consejo de boxeo y frase célebre de Tyson: "Todo el mundo tiene un plan hasta que le dan un puñetazo en la boca", es mucho más profundo de lo que el excampeón mundial de pesos pesados podría haber imaginado.
Recordemos cuando todo el mundo tenía todo invertido en la bolsa o en el mercado inmobiliario. Hace una década, cuando esto pasaba, era de la opinión de que mis amigos deberían conservar un porcentaje de su patrimonio en dinero o, quizás, invertido en oro. Porque me daba la sensación de que el mercado de valores y el inmobiliario estaban recalentados.
Era una observación general pero el viejo axioma de que todo lo que sube, baja seguía rondando por mi mente. Sin embargo, mis amigos y conocidos me ignoraban. Sus inversiones eran brillantes y lo sabían. ¿Por qué preocuparse por la compra de oro cuando las acciones y las viviendas seguían subiendo?
Durante el colapso del mercado de 2008, recuerdo hablar con un amigo que había invertido todo en acciones. Me admitió que estaba tan obcecado con su éxito que no estaba preparado para lo que ocurrió. Recibió un fuerte revés o, pasándonos al boxeo, le dieron un puñetazo en la boca.
Sí, mi amigo tenía un plan (comprar acciones) pero era un plan sin precauciones (las de comprar también un seguro). Solo veía un futuro, el bueno, y no estaba preparado para ninguna otra situación. O, tal y como diría Iron Mike, pensaba que podía boxear pero ni siquiera se había preocupado por ponerse un protector bucal.
Incluso los grandes inversores diversifican. Son dueños de compañías y de otros activos alejados de la bolsa. El hecho de no diversificar equivale a montarse en el coche para un largo viaje sin haberse preparado. ¿De qué preparativos hablo?
- Ir al mecánico para una revisión y asegurarse de que todo está en orden. En otras palabras, buscar ayuda profesional;
- Cambiar el aceite y comprobar las ruedas. Es decir, limpiar tu cartera de activos débiles y añadir otros más fuertes;
- Asegurarse de que la rueda de repuesto está lista y que tienes el equipamiento necesario para cambiar una rueda pinchada. Los ahorradores deben diversificar con activos no correlacionados para protegerse de un posible "pinchazo".
Existen varias maneras de protegerse contra un puñetazo en la boca en los mercados financieros. Pero una tiene que considerar la flexibilidad de cualquier activo no correlacionado- es decir, un activo cuya probabilidad de moverse en la misma dirección que el resto de tu cartera si las cosas van mal, sea mínima. Y es bien sabido entre los asesores financieros que la inversión en oro debería ocupar entre un 5 y un 10% de la estrategia a largo plazo de un inversor. En tiempos de mayor inseguridad y falta de confianza, ese porcentaje suele ampliarse.
Un seguro. Esa es una manera de ver el oro. La única diferencia con un seguro convencional es que una vez lo compras, nunca es expira o se convierte en poco útil. No, uno no planea necesitarlo. Pero tampoco quiere recibir un puñetazo en la boca, que es lo que ocurriría si no lo tiene.