Volatilidad del oro y plata: calma antes de la tormenta
Los precios del oro, por fin, han retrocedido poniendo tope a una inusual subida de seis semanas del precio (algo visto únicamente en 65 ocasiones en los últimos 46 años).
Los precios de la plata se han rezagado en este rally, encontrando dificultades para tocar máximos de un mes. Pero ahora ha llegado la caída, volviendo a empujar al metal al mínimo de tres semanas del pasado lunes y reactivando la volatilidad de la plata.
Mientras tanto, el oro ha caído más de 40 dólares desde su máximo de seis meses del lunes. El martes el oro volvió a cotizar en los 1.361$/oz, nivel que había sido visto anteriormente como resistencia al haber marcado el máximo en el rally de octubre. Los precios siguieron cayendo a medida que la volatilidad iba en aumento, llevando al metal amarillo a varios niveles de "soporte" que según la secuencia Fibonacci y las ondas de Elliot fueron identificados por analistas técnicos como puntos clave de "retroceso" en el rebote de precios en lo que llevamos de 2014.
Pero que no cunda el pánico, se lee en Reuters. Se trata de "recogida de beneficios" y la tendencia alcista de 2014 sigue intacta, según analistas de Scotia Mocatta. Desde UBS consideran que esta caída se verá como una "fase correctiva dentro de la tendencia alcista".
El oro perdió un 30 % de su valor contra el dólar en 2013. La tendencia alcista del a que hablan los analistas empezó en la víspera de Año Nuevo después de que el oro tocara un mínimo de tres años de 1.180 $/oz. El mes que viene marca el primer aniversario del gran desplome del oro. También se trata del tercero aniversario de la plata cotizando en los 50 dólares la onza. Actualmente se encuentra un 60% por debajo de dicho nivel.
Estable, lo que se dice estable, no es. Pero más recientemente, el oro y la plaza han gozado de una calma inusual. Y la baja volatilidad suele marcar la calma antes de la tormenta.
A finales de febrero se vio la volatilidad en los precios de la plata, que se calcula con los cambios diarios de la cotización del mes anterior, subir desde sus niveles más bajos desde junio de 2007. Eso fue antes de que la crisis financiera empezara, con la contracción del crédito en verano provocando la casi quiebra de Northern Rock, que actuó como señal de alarma para el sistema financiero occidental.
En cuanto al oro, la volatilidad creció la semana pasada desde su punto más bajo desde el jueves, 11 de abril de 2013. El día siguiente, el oro cayó 30 dólares la onza y perdió 140 dólares más cuando el mercado reabrió el siguiente lunes.
Así que parece que si ya hemos tenido la calma, puede que se avecine una tormenta. Pero, ¿dónde caerán los relámpagos, sobre los activos financieros o sobre los metales preciosos?
*Artículo traducido y editado por María Vengut